Si a la vez tomamos diariamente por lo menos una cuchara de aceite virgen de argán, contribuiremos a que la piel no pierda firmeza, brillo y elasticidad.
Con el aceite de argán nos protegemos del efecto de los rayos solares, del viento y de la contaminación.
Las arrugas de expresión también se suavizan con el uso de aceite de argán.
Científicos de la Universidad de Metz, en Francia han probado los efectos del aceite de argán y certifican que revitaliza y regenera la piel, recomendando el uso del aceite para eccemas, neuro-dermitis, varicela, acné, psoriasis, y quemaduras solares.
Los científicos franceses han probado con resultados muy positivos los efectos de la utilización del aceite de argán, confirmando las propiedades que desde hace muchos años conocen las mujeres bereberes.
Ahora, científicamente estudiado, se puede afirmar que las propiedades del aceite de argán son beneficiosas para la piel, provocan el rejuvenecimiento de las células, regeneran, hidratan, son antiarrugas, nutritivas, anti-estresantes y protectoras de todo tipo de epidermis. El aceite de argán es recomendable a todas las edades.
Análisis clínicos muestran que el aceite de argán es rico en ácidos poli y mono-insaturados (omega 6, y 9), conteniendo en el 80% ácidos grasos esenciales (50% ácido linoléico, 15% de alfa-linoléico, 12% de oléico, 3% de gammalinoléico, 1% de araqui-dónico), y una importante cantidad de tocoferoles (vitamina E), en cantidades tres veces mayor que en el aceite de oliva.
Este tipo de ácidos esenciales sólo se pueden aportar al organismo a través del los aceites vegetales. Utilizando este aceite como alimento, y como uso externo introducimos los nutrientes en los fosfolípidos de las membranas para hidratar la piel, revitalizándolo. El ácido graso recibido en el organismo retrasa el proceso de envejecimiento, y esta es la función del aceite de argán
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Según estudios realizados por nutricionistas, estos ácidos aportados por el aceite de argán son indispensables para el desarrollo y buen funcionamiento de las hormonas intracelulares prosta-glandinas (relacionadas con la reproducción y fertilidad). Los ácidos esenciales del aceite de argán ejercen una aportación importante en todo lo que es regulación del sistema celular, previniendo enfermedades cutáneas y enfermedades provocadas por la degeneración de células.
El aceite de argán cosmético 100% natural es incoloro y de olor y sabor muy suave. Se puede aplicar por todo el cuerpo, cara y cabello. Instantáneamente la piel queda satinada, el aceite es rápidamente absorbido y no engrasa. Una buena manera de aplicarlo es al salir del baño o ducha, directamente sobre la piel mojada, realizando un suave masaje. El aceite de argán deja la piel hidratada y muy sueva, dándonos una sensación de bienestar y relax.
Se recomienda siempre utilizar aceite de argán natural 100% aunque en casos de pieles muy secas, podemos hacer un preparado añadiendo una parte de aceite de almendras dulces.
El aceite de argán repara los cabellos rotos y deshidratados, lo podemos aplicar directamente dejándolo actuar 30 minutos envueltos en un paño o toalla. Si tenemos el cabello muy seco o quebradizo de las puntas, podemos utilizar a diario el aceite aplicado en seco en las puntas.
Para las uñas quebradizas prepararemos una mezcla hecha con aceite de argán y zumo de limón exprimido. Con el preparado nos pintaremos las uñas o pondremos las puntas de los dedos dentro un cuenco con el líquido para que se remojen las uñas durante unos 15 minutos.
El aceite de argán aporta nutrientes suficientes para que utilizado a diario, se frene el proceso de envejecimiento prematuro de la piel causado por radicales libres, tabaco, contaminación o desajustes hormonales.
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